Por Juan Tomás Valenzuela
Justamente en las provincias
donde se concentra el voto,
le han echado Ajinomoto
los jueces de la codicia,
a lo que Nuria y Alicia
antes habían denunciado.
Que todos estos desalmado
que han sido tanques de lastre,
pueden seguir con su arrastre
y apropiarse del Senado.
El pedante de Reinaldo,
que hasta su mai lo desprecia,
realizó otra peripecia
para quedarse enganchado,
como jefe del Senado,
si es que no logra imponer,
que Danilo, que Leonel,
o los otros aspirantes
lo dejen pasar alante
en su travesía al poder.
La otra es Cristina Lizardo,
senadora analfabeta,
y su ensayo de probeta
de homóloga de Reinaldo.
Esta vieja “bebecaldo”,
que no ha propuesto una ley,
quiere seguir siendo el bey
de aquella tibu de oriente,
pa’apoyar su presidente,
también otro pata’e buey.
A otro que le dién lo suyo
por traicionar a Leonel,
es al senador infiel
que hizo cientos de chachuyos,
y escondío como un cocuyo,
aprobó tó los contratos
que el presidente avivato
le envió con un tal Rondón,
su teammate en corrupción,
en coimas y en desacatos.
Quiero hablar de San Cristobal
y su senador Galán,
pero hablar de ese patán
que barrió más que una escoba,
sería hacerle otra joroba
al camello del delito.
Entre él y el mariconcito
que ahora es alcalde en Santiago
hicieron cientos de estragos
junto a João y el mudito.
El Dr. César Castaños,
quien aún goza de mi aprecio,
no debía ponerle precio
a un honor de tantos años.
Él no a escatimado el daño
que ocasiona a su figura,
unirse a este caradura
que gobierna este solar,
pues si lo dejan pasar,
impone una dictadura.
Juan de los Palotes
8 Mayo 2019